Desnúdame en tus pensamientos
y devórame de amor en tus sueños.
Imagina loca, que conmigo estás durmiendo:
que me tocas,
que me besas,
muerdes y acaricias,
y me sumerges en tus mares
del encanto y del placer.
Alucina que en este magno cortejo,
la ficción del éxtasis explota
en nocturnidad desnuda,
y la quimera de tu calor
despierta al fuego de mi calor.
En esta loca ilusión
beberás el vino de mi amor,
y yo…con la melodía aleve de mis dedos
entraré al huerto de tu cuerpo,
y te hare mía…
Lo sabrás, pero sólo estando
incrédula en el cielo.***
La poesía es un ritual exacto al amor y al olvido, donde el trovador vierte su nostalgia y pasión en cada fonema perforado por la indiferencia y la ternura de la mujer amada. La Poesía es aderezo del caldo poético adolorido; es dolor incinerado por las llamas del amor. La poesía, es engendrar fetos de recuerdos, en las calles secretas del corazón que ha sido lastimado por los dientes del olvido.
miércoles, 28 de septiembre de 2011
lunes, 19 de septiembre de 2011
DANZAN MIS OJOS EN TUS PUPILAS
Te miro…
y la tristeza danza en mis pupilas;
no comprendo, de cómo en un año
realizé un viaje por tu piel.
Llena de vida te dejé un día,
escapar fresca de mis retinas
Mii elixir hizo un festín entonces
en el edén de tu hermosura.
Cuéntame amor…
¿Qué sentimiento te ha marchitado?
¿Qué minuto amargo sembró vejez
en los paisajes de tu risa?
¿Con quien danzaban mis ojos en los tuyos?
Llena de vida quedaste. Pero ciega.
Culpable fuiste del adiós nuestro
y culpable fuiste de ser mía.
Ahora que la bitácora del tiempo
secó el geranio de tu juventud,
culpas al yaraví de mi ausencia,
de llevar a tus abismos
la sombra de mi cruz.
Dime entonces:
En esta ausencia,
¿con quien danzarán mis ojos? ***
y la tristeza danza en mis pupilas;
no comprendo, de cómo en un año
realizé un viaje por tu piel.
Llena de vida te dejé un día,
escapar fresca de mis retinas
Mii elixir hizo un festín entonces
en el edén de tu hermosura.
Cuéntame amor…
¿Qué sentimiento te ha marchitado?
¿Qué minuto amargo sembró vejez
en los paisajes de tu risa?
¿Con quien danzaban mis ojos en los tuyos?
Llena de vida quedaste. Pero ciega.
Culpable fuiste del adiós nuestro
y culpable fuiste de ser mía.
Ahora que la bitácora del tiempo
secó el geranio de tu juventud,
culpas al yaraví de mi ausencia,
de llevar a tus abismos
la sombra de mi cruz.
Dime entonces:
En esta ausencia,
¿con quien danzarán mis ojos? ***
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